A todo el mundo le gusta reír, todo el mundo se ríe de algo
en cada momento, y porque no reírnos de nosotros mismos.
La risa está localizada en la zona prefrontal de la corteza
cerebral, donde reside la creatividad, capacidad para pensar en futuros próximos,
a medida que vamos creciendo, ganamos en madurez pero perdemos la espontaneidad
de dejarnos llevar por la risa, o incluso de ver el lado positivo y cómico de
las cosas, de ahí que haya veces que convenga recordar como reír, existen
terapias para ello, destacando la risoperapia.
Reírse tiene numerosas ventajas, entre las que destacan:
Las carcajadas disminuyen el insomnio.
Previene los infartos, ya que los espasmos que se producen
en el diafragma fortalecen los pulmones y el corazón.
Rejuvenece la piel porque tiene un efecto tonificante y
antiarrugas.
Al liberarse endorfinas, tiene un efecto analgésico.
La carcajada hace vibrar la cabeza y se despejan la nariz y
el oído.
Reduce la presión arterial.
Refuerza el sistema inmunológico.
Facilita la digestión, al aumentar las contracciones de los músculos
abdominales.
Mejora la respiración.
En cuanto a los efectos a nivel psicológico, la risa elimina
el estrés y alivia la depresión, incrementando la autoestima y la confianza en
uno mismo, combate miedos y fobias, así como la timidez, al facilitar la comunicación
entre las personas, expresando emociones y favoreciendo la existencia de lazos
efectivos, la risa alivia el sufrimientos, además de descargar tensiones, potenciando
la creatividad y la imaginación.
La risa ayuda también a un buen funcionamiento de nuestra
mente, nos predispone a las relaciones sociales, pero además nos ayuda a
enfrentar situaciones difíciles como perdidas o decepciones, no es un dato
menor, cuando reímos es porque una situación nos parece divertida y muy
graciosa, por esto es que es imposible reírse y estar triste al mismo tiempo.
En esos segundos en que le permitimos a nuestro cuerpo olvidarse
del dolor, lo estamos ayudando a tomar valor para enfrentar problemas y situaciones
duras, y hacemos que la mente comience a pensar en perspectiva, así, nuestros
pensamientos son más realistas, mas antes para promover la aceptación o para
generar soluciones efectivas y rápidas.
Es cierto que hay momentos en la vida que dejamos de reír,
por cualquier motivo, es difícil cuando tienes grandes preocupaciones, o estas
pasando un mal momento, o por otros motivos personales dejamos de reír, sin
darnos cuenta no nos acordamos de reír, y no nos acordamos que cuando somos
niños nos reír del mundo y si hace falta hasta de nuestra sombra, pero vamos
cambiando.
Pues yo no, me gusta reírme de mi misma cada mañana que me
miro en el espejo, me rió de mi cuerpo que según temporadas por las tiroides,
llego a ser el barril de cerveza vestido, otras veces puedo llegar a ser la
botella de coca cola de dos litros o pocas veces un palo de escoba con tres
cabezas, pero no voy a perder la sonrisa nunca, porque perder la sonrisa con lo
bueno que es para cada rincón de nuestro cuerpo.
Siempre hay algo que nos hace reír, siempre tenemos un
recuerdo que también nos hace de reír, bueno yo es que tengo muchas y siempre
me estoy riendo de una misma.
Así que ya sabéis a reírse que es el mejor método para
muchas cosas de nuestro cuerpo.
Fotos sacadas de Internet.
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